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- José Ruiz Elcoro
- Siempre la sonrisa de Lucy
- Félix Guerrero, Batuta de Oro
- Jesús Gómez Cairo (+)
- Kiko Mendive
- Nicolás Guillén, Poeta Nacional de Cuba
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- Luna, Boleros y Son – II
- Luna, Boleros y Son
- Elena Burke, La Dama del Feeling
- La revolución que quiso ser – VII
- El Joropo Venezolano
Azulinimismado X
Azulinimismado X
Museo de los desaparecidos
El niño al guía de museo:
¿Y a éste qué le pasó?
Ahhh éste apareció dentro de un bote de ácido muriático…
¿Y éste otro?
éste fue encontrado colgado de un puente
¿Y aquél?
éste es interesante
los curadores lo formaron
de muchos otros cuerpos
tiene un algo de vagina y pene infantil
un seno más moreno que otro
y las manos rugosas de campesino
con los muslos dulces de una quinceañera
¿y aquellos?
El niño apuntaba hacia unas enormes fosas abiertas en el centro del museo
Ahhh ésos de ahí aún siguen llegando
son aquellos que fueron diputados o senadores en un tiempo
y que son arrojados de manera anónima cuando cometen actos de corrupción
Esta instalación se llama: La fosa ciudadana
Bailaremos tumbas
Esa es la media luna,
esa la estrella de cinco picos
esas mis barras y estrellas
mis tacones y mis arandelas
Ese es el rifle de alto poder
estas son mis granadas
unas locomotoras
dos helicópteros entre las piernas
y que vengan los disparos
desde todos los rincones
Acá cayó el enemigo
Acá se hundieron las torres
ahí los niños mueren
las mujeres desnudas se cubren el rostro
escarbando su propio agujerito
Mira que en dios confío
y en la guerra santa
el que no esté conmigo
que se tire al río
que vienen los malos vienen
desde los helicópteros
y se repite
me coseré a la piel el vestido
me pintaré en la espalda la clave de sol
me tatuaré en los labios
cualquiera de las plegarias
para bailar sobre tumbas
sobre los huesos brincar
y con las balas cantar cantar y cantar
que el que se vaya a dormir de último
active la bomba nuclear
(un día me dijeron que dios se había escondido
avergonzado de tanto hijo de la chingada
que se le había nacido)
Es mi corazón
una bomba de tiempo a punto de estallar
mis puños son el juez
mi vida es la distancia para la eternidad
No hay que temer
Es mi corazón
una bomba de tiempo a punto de explotar
mis labios el día del juicio final
mi muerte la única puerta abierta
No hay que temer
Dulce ronda
niños pequeñitos formados en fila
redondos corazones perforados
niños grandototes trepados en la cartera
otros niños les quitan los zapatos
para venderlos
y comprarse un mazapán
Soldadito dime tú
quien te instruyó con tanto cuervo en el oído
¿esa rata sobre el pavimento
o el hurón del escritorio?
dime cuántas veces vas a morir para tu madre
cuántas noches más vas a mirar las nalgas
de los compañeros en la letrina
mejor ir a la casa
desabrocharse y
tomarse una sopa caliente
abrigado y en familia
Nuestras vidas son los ríos
cómo se pasa la vida
cómo se viene la muerte
tan callando;
Jorge Manrique
y hoy los ríos ya no tienen precio
las inundaciones desdoblan precipicios
los ríos se nos abren en el sueño
hoy que las tormentas inundan avenidas
y la basura tapa alcantarillas rojas
los ríos se nos muestran parpadeando
Nuestras vidas son los ríos
y no podemos bañarnos tantas veces
ni estar desnudos en la cama
porque el esposo llega
o el novio se quita la vida
o viene el casero
y te cobra un poco más de renta
Adán Echeverría
2011
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