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Hormigas de fuego
Las hormigas coloradas son insectos de color rojo que pican e inoculan una sustancia dañina, llamada veneno, dentro de la piel. El veneno de las hormigas coloradas o rojas contiene un químico llamado piperidina. Existen tres tipos de hormigas de fuego muy peligrosas: la hormiga de fuego importada, la hormiga de fuego negra y la hormiga de fuego nativa.
La verdadera hormiga roja es la importada de América (Solenopsis invicta), aunque en Latinoamérica se conocen como hormiga brava o colorada. Debido a que fuera de su lugar de origen no tiene depredadores naturales, estas campan a sus anchas sin temor a ser devoradas. Es la especie más adaptable al entorno que le rodea, capaz de soportar cambios bruscos de temperatura. Hoy en día se considera una plaga mundial, ya que desde América del Sur se ha ido desplazando hasta el sur de Estados Unidos, China, Taiwán, Filipinas e incluso Australia.
Las hormigas coloradas u hormigas rojas construyen nidos de barro que forman montículos de entre 37 y 74 centímetros de diámetro, y de unos 26 centímetros de altura, generalmente en pastizales abiertos.
Estas hormigas suelen anidar en ambientes húmedos, de ahí que su hogar esté bajo suelo irrigado con césped y los márgenes de los ríos o estanques; evitando las áreas sombrías. Sus colonias son enormes, y pueden albergar cientos de miles de hormigas obreras, y al menos una hormiga reina, así que a cualquier intruso que se atreva a asomar la nariz por allí le espera una fuerte defensa y algún que otro mordisco.
A diferencia de lo que todo el mundo piensa, estas hormigas pueden ser de color rojo o negras, y pueden rondar un tamaño de hasta 6 milímetros. Tienen unas mandíbulas tan fuertes como para poder cazar pequeños animales. En su abdomen se encuentra el veneno que inyectan a sus presas a través del aguijón.
Además, son unos insectos muy fuertes aparte de feroces, pues son capaces de mover los huevos, las larvas y las crisálidas de un lado para otro por los miles de túneles hacia las distintas galerías. Su ciclo de vida depende del tipo de hormiga colorada que sea. El tiempo total que transcurre entre la fase de huevo hasta ser un adulto oscila los 30 días.
Las hormigas rojas obreras duran unos 180 días; si son hormigas reinas tienen una vida de entre 2 y 6 años. Aunque suelen ser más activas durante las horas finales del día, cuando las temperaturas son más húmedas, las hormigas obreras no descansan durante las horas más calientes y soleadas del día buscando comida, evitando siempre la oscuridad y las sombras.
Podemos ver que estos insectos son una especie omnívora, es decir, que se comen las semillas de una planta como unos pequeños insectos. Pero mucho cuidado porque se nos pueden colar en casa, como cualquier otro insecto, en busca de grasas y alimentos dulces.
Son feroces cazadoras, atan a sus víctimas con sus fuertes mandíbulas para después inyectarle el veneno por su aguijón. Cuando pican a las personas con su aguijón, podríamos comparar el dolor de su picadura con el que produce una quemadura con una cerilla, por ello es por lo que se las denomina “de fuego”. La gran mayoría sufre un dolor agudo y un verdugón colorado, sin ser alérgicos a su veneno, aunque hay personas que sufren una reacción muy severa con síntomas identificables como una gran sudoración, náuseas o excesivo picor, por ello es imprescindible acudir a los servicios médicos cuanto antes.
Los síntomas de las picaduras de la hormiga de fuego pueden incluir:
- Hinchazón, enrojecimiento, picazón y dolor alrededor del sitio de la picadura
- Ampollas purulentas que duran de 3 a 8 días
- Posible formación de costra en la zona de la picadura que dura de 3 a 10 días
Síntomas severos
- Dificultad respiratoria
- Frecuencia cardíaca rápida
- Inflamación de la garganta
El tratamiento en el hogar depende de la localización y reacción a la picadura. Lave la zona expuesta con mucha agua y jabón. NO use alcohol para lavar la zona. Lave los ojos con mucha agua si les cayó cualquier toxina.
En caso de picaduras leves, aplique hielo (envuelto en un paño limpio) en el lugar de la picadura en intervalos de 10 minutos, repitiendo el proceso. Si la persona tiene problemas circulatorios, disminuya el tiempo de aplicación de hielo para evitar posibles daños a la piel.
Algunas personas son alérgicas al veneno de las hormigas rojas o coloradas. Si la reacción es grave, busque ayuda médica inmediata. Aquellas personas que tengan una alergia a las picaduras o mordeduras de insectos deben portar un equipo de urgencia para la picadura de abejas y estar familiarizadas con la forma de utilizarlo en caso de una emergencia.
Cuanto antes comience el tratamiento adecuado, mejor será la respuesta de la persona (desenlace clínico). Las personas que no son alérgicas a las hormigas coloradas deben estar completamente bien a las pocas horas o días. Los individuos con reacciones alérgicas graves pueden necesitar hospitalización.
Muchas personas ponen el alimento de sus animales, principalmente la comida de gatos, fuera de sus casas. Las hormigas se ven atraídas por los nutrientes de estos alimentos, por lo que desarrollan un hábito para venir a pos la comida de nuestras mascotas.
Una cantidad considerable de este tipo de hormigas es capaz de atacar a pequeños animales, tanto salvajes como domésticos, y llegar a herirlas gravemente o incluso a matarlas.
Lo más prudente y eficaz es ponerse en contacto con un profesional en control de plagas si ya has sido invadido por estos insectos, para que sea él quien se haga cargo del problema.
Dra. Carmen Báez Ruiz
drabaez1@hotmail.es
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