El Rincón del Tío Salim
Sobrinitos,
El mes de abril es el más esperado por niños y niñas de México, pues en nuestro país se les festeja cada día 30.
¿Sabían que las Naciones Unidas celebra el Día Universal del Niño el 20 de noviembre, pues en esa fecha la ONU aprobó la Declaración de los Derechos del Niño en 1959?
En México fue en el año de 1924 cuando el presidente de la República, Álvaro Obregón, y el Ministro de Educación Pública, José Vasconcelos, señalaron el 30 de abril como el Día del Niño.
Cada familia festeja a sus hijos; también en sus escuelas se realizan festejos, con actividades recreativas, juegos, regalos, artistas invitados como yo y mis muñecos Rufino y Max, conciertos y mucha comida. Las piñatas se incluyen en casi todos los festejos, pues a todos les encanta recoger dulces.
Algunos padres obsequian regalos a sus hijos, otros quizá no puedan hacerlo, pero lo verdaderamente importante es transmitir nuestro cariño y aprecio en esta fecha muy especial.
A lo largo de mi carrera artística participé en cientos de festivales infantiles celebrando el Día del Niño. Debo ser muy franco: una de mis satisfacciones más grandes es llenarme de esa energía de fraternidad, de amistad y de empatía que se transmite en esos eventos. Estoy muy agradecido con todas las maestras, directoras y profesores y directivos de tantos colegios de Yucatán que recorrí por tantos años, pues cada ocasión fue muy especial para mí.
El festejo a los niños varía de fecha de acuerdo a las tradiciones de cada país. En Turquía se celebra cada 23 de abril, ese día los niños asumen puestos importantes de manera simbólica; en Japón, cada 5 de mayo las madres elevan banderas en forma de peces y cocinan dulce de arroz para los chamacos. También hay fiestas especiales en Chile, Nigeria, Alemania y, por supuesto, en nuestro México.
Recuerden entonces que, además del festejo del 30 de abril, a fin de año tendrán otro en el mes de noviembre, pues un día 20 de ese mes, en 1959, las Naciones Unidas aprobaron la Declaración de los Derechos del Niño y, en la Convención sobre los Derechos del Niño en 1989, se volvió el tratado internacional más ratificado de la historia. Este día mundial nos recuerda que todos los niños tienen derecho a la salud, la educación y la protección, independientemente del lugar del mundo en el que hayan nacido.
Mi consejo a las familias es que, sea cual sea la fecha de celebración a nuestros niños en sus respectivos países, intenten festejarlo juntos, ya sea saliendo a comer algo, a un parque, simplemente a caminar y platicar en otro ambiente. También pueden realizar una gran comida o cena en la que incluyan un maratón de chistes, un club de cine familiar, o divertirse con juegos de mesa, lo que les resulte más entretenido. Lo importantes es la convivencia de la familia.
SALIM ALCOCER LIXA
