Editorial
Don Oswaldo Baqueiro López, gran valor de las letras yucatecas, hombre que fue parte de una generación brillante de escritores del siglo anterior, dejó a la posteridad, a las nuevas generaciones culturales, el sano ejemplo de su madurez humana y su gran calidad intelectual.
Su último libro escrito y publicado fue a su hijo Oswaldo, como él, a quien dedicó sus últimas letras en el conmovedor texto “La tremenda aventura de Samuelito y Toporat”, creado por su mente amorosa de padre durante los años infantiles de su pequeño Oswaldo Baqueiro Brito, para impulsar su interés por la lectura.
El nombre de Oswaldo Baqueiro López, merced a una disposición de la Secretaría de la Cultura y las Artes del Gobierno del Estado de Yucatán, ha quedado incorporado a un reconocimiento anual al periodismo cultural, ese de gran calidad que deja huellas en nuestra historia por su valor reflexivo, contenido y calidad literaria.
Año con año, por estas fechas, el Gobierno del Estado y la Secretaría de la Cultura y las Artes convocan a proponer merecedores de la Medalla que ostenta el nombre de este gran intelectual y ser humano.
En este año, el premio 2022 ha correspondido al reconocido promotor cultural Don Jorge Cortés Ancona, hombre de letras de muy amplia trayectoria. El día de hoy, en que se publica este comentario, la condecoración ya se habrá entregado y tendrá consigo el premio y el Diploma a los que se hizo acreedor. Una medalla que ennoblece a quien la recibe y recuerda nostálgicamente al escritor a quien la medalla puso su nombre.
Escribimos esta nota acompañados del recuerdo de Don Oswaldo Baqueiro López, amigo entrañable, compañero de letras y escritor admirable.
Es grato recordarlo, traerlo a nuestra memoria para reiterarle nuestro afecto invariable y amistad eterna. Su sitio es permanente en nuestros solidarios corazones.
