Atisbando en los Recuerdos
Alfonso Hiram García Acosta
El Teatro “Guaso”, junto con el Cine Teatro América, acogió a la Delegación Mexicana en el mayor evento triero de la isla cubana en su provincia más oriental, Guantánamo. Nos acogieron con afecto fraterno y nos dieron la oportunidad de conjugar la poesía con la música. Desde 1991 a la fecha, nuestros lazos culturales siguen en comunicación directa.
El Diario del Sureste nos hace llegar ahora a nivel virtual, recorriendo el mundo, como antes en el periódico impreso. Reporté para el Diario desde Cuba, Colombia y Venezuela, cubriendo eventos como el Festival de Bambuco en Ciudad de México y Colombia; las Méridas del Mundo en Venezuela y España; los Festivales de Tríos Cantares de América; Boleros de oro; Jazz, Semanas de la cultura, Semana de la ópera y de la zarzuela, Feria del Libro y otras en Cuba. Agradezco al Diario del Sureste mi trabajo de columnista que me mantiene trabajando en la industria de las letras.
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El Teatro Guaso –o Cine Teatro Luisa, como suele ser recordado por los que peinan canas– abrió sus puertas por primera vez al público el 7 de febrero de 1957, con la proyección de la película norteamericana Kuruzú. Era propiedad del señor Antonio Costa, comerciante de origen español que lo bautizó con ese nombre en homenaje a su hija, antes que esta falleciera a los 15 años de edad. La edificación fue diseñada por el arquitecto guantanamero Malaquías Pérez y llevada a cabo por maestros de obra. Fue calificado por la prensa de la época como: cómodo, ventilado y agradable.
La gran acogida por parte del público demostró la calidad de dicha institución y su equipo de trabajo se proyectaba por brindar cada día un mejor servicio a través de la introducción de mejoras tecnológicas y la exhibición de las últimas y más apreciadas producciones cinematográficas. En La Habana el señor Costa realizaba los contratos de alquiler o de porcentaje con las diferentes compañías de cine: La Pelimex, La Metro Golden Mayer, Wagner Bros, Universal Pictures, La Rang, La Columbia Pictures.
El triunfo revolucionario de 1959 trae consigo una serie de mejoras y modificaciones que de manera directa también van a influir dentro de la cultura, creando una serie de organismos e instituciones que regirán dicho sector. El Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfica (ICAIC) es ejemplo de este desarrollo y al ser nacionalizado el Teatro Luisa en 1964 pasa a ser una de las entidades miembros de este instituto. A raíz de la división política administrativa, realizada a finales de la década del 70, se decide cambiar el nombre de algunos establecimientos culturales y comerciales. Desde ese momento comienza a llamarse Cine Teatro Guaso y, al pasar el tiempo, solo Teatro Guaso.
En 1985, al obtener la Ciudad de Guantánamo la sede por el Acto Nacional del 26 de Julio, se acomete, por parte de la Empresa de Reparaciones de Cines y Teatros de Santiago, la reparación del edificio, proyecto que realizó el arquitecto Eduardo Rost, que pertenecía al grupo ICAIC de La Habana. Entre las intervenciones constructivas realizadas cabe destacar la ampliación del escenario y los camerinos. Con posterioridad se agregaron nuevas tecnologías y equipamientos acogiendo el escenario de espectáculos más complejos y propiciando el disfrute pleno del público.
En los años 80 y 90 era Guantánamo una fuerte plaza del mundo del espectáculo: eventos culturales, festivales, concursos, artistas locales, nacionales e internacionales desfilaban por los diferentes escenarios de la provincia. Encuentros de coros, Festivales de tríos Cantares de América, del Changüí; sub sedes de algunos Festivales “Boleros de Oro”, primer Concurso de Música Infantil “Cantándole al Sol”, una gran variedad de espectáculos el pueblo guantanamero esperaba con ansiedad.
En el Teatro Guaso, en el 91, trabajé en escena con los tríos “Los Ángeles”, “Los galanes de México” y con el Trío Ensueño –ganadores del festival “Cantares de América»– haciendo poesía en sus puentes musicales y como conductor en algunas secciones del mismo. No podías salir a escena sin haber pasado por el centro de maquillaje y revisión del vestuario. También declamé la poesía “Elegía a un viejo cantor”, sobre un ensayo poético dedicado al médico, escritor, pintor Regino Boti, considerado en mejor poeta de hace dos centurias. “Los Bohemios”, de Cienfuegos, pusieron el fondo musical con obra de Eusebio Delfín, insigne compositor que da pie a la trovadoresca de Yucatán junto con Rafael Gómez “Teofilito”, compositor espirituano. Logramos un acercamiento poético entre Cuba y México, de la provincia de Guantánamo con Yucatán, y de Mérida con Guantánamo como Ciudades Hermanas. Nuestro estandarte Yucateco se encuentra en el Salón de Protocolos del Poder Popular de Guantánamo.
Ha sido este el escenario idóneo para el homenaje a prominentes exponentes del mundo de la música, tales como Rafael Iniciarte, Antonia Luisa Cabal “Tusy”, Pablo Milanés, Omara Portuondo, Eliades Ochoa, Ivette Cepeda, entre otros; y ha recibido a prestigiosas agrupaciones y figuras del arte. Cabe mencionar la presencia de la Orquesta Sinfónica Nacional de Cuba, el Ballet Nacional, Ballet de Alicia Alonso; Ballet de Liz Alfonso, Danza Teatro del Caribe, Teatro Estudio y grupos extranjeros como el célebre teatro colombiano “La Candelaria” y el “Club del Clown” de Argentina. Son recordadas las actuaciones de Rosita Fornés, Compay Segundo, el grupo “Síntesis”, La Orquesta Aragón y muchos más.
Resulta habitual la realización de temporadas danzarías y teatrales que representan las diferentes compañías del patio: Danza Libre, Danza Fragmentada, Ballet Folklórico Babul, Médula, Grupo Campanario, Compañía Jagüey, grupo humorístico komotú, grupos estos que prestigian la sala y realizan presentaciones memorables para todo tipo de público.
El Teatro Guaso no se ha limitado a la presencia de espectáculos artísticos, pues en él se desarrollan graduaciones universitarias, actos solemnes y asambleas, que también forman parte de la vida socio cultural del territorio.
Esta institución pertenece al Consejo Provincial de las Artes Escénicas de la Provincia de Guantánamo. Está ubicado en la Avenida de los Estudiantes (Paseo) entre 13 de Junio (Ahogados) y Regino Boti (Cuartel). Fue nuevamente remodelado en el 2012 dotándolo de aires renovadores y ambientación elegante que hasta hoy mantiene gracias al esmero y dedicación de su personal de trabajo.
Van mis saludos hasta la Aldea del Guaso, como diría Regino Boti, recordando a funcionarios y amigos que me dieron la mano para mi trabajo periodístico, como poeta y ahora en parte historiador de la Cuba que pisé por ver vez primera en 1951, siendo adolescente.
Ahora, a los 86 años, en una vejez pandémica, mi estro se transporta recogiendo momentos de mi vida en las diferentes partes del mundo que pude visitar.
El Teatro ”Guaso” nos acogió en varios Festivales, lo que me hace recordar a Israel Martínez Zapata, fundador de la Asociación de Tríos de Cuba y del festival “Cantares de América”; Francisco Speck, Director del Centro
Provincial de la Música y hoy representante de la Asociación de Autores y Compositores, que cuida nuestros derechos de autor; Carlos Hernández quien fuera Director Provincial de Cultura; Flora González Renda, Secretaria de la Asociación de tríos; Emigdio león, Presidente del Poder Popular y posteriormente Ministro de Salud; a los miembros de la asociación “Hermanos Saíz”, que me declararon Miembro Honorario; al colectivo de CMKS, cuyos micrófonos siempre están abiertos en su programa radial “Bajo el Cielo de México; a los Drs. Manuel Sevila y Bárbara Elías Calles Fernández, que me brindaron apoyo clínico y me abrieron las puertas de su hogar; Danae Martínez Matureli; a los compañeros del café “La Indiana”; a los tríos guantanameros “Los Martínez”, “Los Amantes”, “Los Rubíes”, y “Voces de Levante”; a Alejandro Hartan, historiador de Baracoa y Director del Museo Matachín, y a José Castro, su curador; al tenor Amado Lovaina; a Pedro Pérez Olivares, quien me entrevistó en tres ocasiones para la radio y Sol Visión de Tv; a Florentina Boti e hijo Dr. Regino Rodríguez Boto “Piti”, quien recogió la obra poética de su abuelo, el insigne Regino Boti, y la musicalizó; Juan Francisco Guillarte Frómeta, locutor y creador del programa “Bajo el Cielo de México”; a los compañeros de la UNEAC; a George Pérez, artista plástico; a la modelo “Macucha” y al colectivo del Hotel “Guantánamo” que tantas atenciones nos brindó.
A los que han ocupado un nuevo plano astral, elevo un pensamiento, y a los que sobreviven la pandemia y continúan en la brega del diario yantar, mi solidaridad y afecto. Gracias a todos, y a los omitidos que escapan de mi mente.
Fuentes
