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Melo Collí da una lección de Teatro Regional en el 152 Aniversario de Ticul

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Foto tomada de la página Facebook del actor.

PICARESCO, DIVERTIDO, FAMILIAR, NOS RECORDÓ AL EXTINTO TEATRO HÉCTOR HERRERA

edgar rodríguez cimé

Cuando el primer actor Ricardo Adrián, alias Melo Collí, presentó al elenco de la obra regional realizada en la Concha Acústica de la ciudad de Ticul durante su 152 aniversario el miércoles 24 de julio y luego de mencionar su nombre remató con “…mi esposo”, nos dio dos cátedras: mostró esa dramática picaresca y divertido que nos recuerda lo mejor del teatro regional del siglo XX, y también que es un artista reconocido que asume y presume su diversidad sexual.

Lo primero a subrayar con plumón negro es que, a diferencia de otros cómicos regionales que solamente utilizan diálogos con pura morcilla (chistes para rellenar el tiempo), Melo Collí nos demostró que el teatro regional, a contrapelo del teatro obsceno de las antiguas tandas en el De Efe al de revista, goza de buena salud en Yucatán y puede ser picaresco, entretenido y jocoso, sin caer en la vulgaridad de los diálogos a base de malas palabras y ofensas al público.

Rescatando el antiguo formato del teatro regional, Melo integra a la obra un conjunto musical (baterista y tecladista que la hacen de músicos), escenografía y utilería cuando el gran histrión lo considera necesario. Abren y cierran la obra sendas canciones interpretadas por su majestad Melo, lo cual le da un buen sabor de boca con su estética vintage.

El argumento de la obra consiste en un enredo entre Melo y un amigo quien, macho irredento, lo invita a “hacerle el paro” (favor) para poder engañar a su mujer -muy celosa- y verse con su amante. La idea es facilitarle las condiciones para que en la noche, cuando ellos duermen, entre a robar. Entonces, lo descubren y su amigo le apuntará con una pistola. Una vez detenido in fraganti, su amigo le propondrá a su esposa que ella se quede vigilando al ladrón, apuntándole con el arma, mientras él va por un policía cercano. Pasado un rato, el amigo regresará para informar que no hay ningún policía cerca y, por lo tanto, él mismo se encargará de llevar al ratero a entregar a la comandancia de policía, lo cual aprovechará para soltarlo y entregarle un dinero como agradecimiento.

Los enredos melocollilenses comienzan cuando, cantinflescamente, él y su camarada parlotean, intentando ponerse de acuerdo para hacerle un favor que aquel necesita de Melo, quien rescata antiguas y probadas fórmulas para causar la risa del respetable, como cuando su cuate le conmina a guardar silencio y él responde: “¡Por favor, cállate!” / “¿Hay nené?” (como cuando sucede durante la etapa después de nacido el bebé en la zona maya y alguien se atreve a hablar fuerte cerca de él).

Desde antes de empezar, Melo aclaró que el presidente municipal (panista) le pidió que los chistes y la carrilla fueran de nivel familiar por estar presentes familias y niños entre el público que abarrotaba, sentados y parados, la Concha Acústica. De cualquier manera, el histrionismo, la gracia natural y su picaresca fueron suficientes para trasladar el buen ambiente familiar del extinto Teatro Héctor Herrera hasta la Perla del Sur: Ticul, donde Melo hizo de las suyas ante un público que se le entregó.

Como detalle: cuando Melo agradecía al respetable su entrega y aplausos, cayó en la cuenta de su nuevo público: un “cordón” de chiquitines de ambos sexos sentados en el mismo suelo, antes de la primera fila, quienes dentro de 50 años podrán presumir a parientes y amigos que ellos conocieron a Melo Collí, el último gran actor de teatro regional yucateco, una noche estrellada de julio en la Concha Acústica de Ticul en 2019.

Allá arriba, desde una especie de grada, a la manera de las antiguas carpas, seguro había una muchedumbre liderada por el abuelo de Cholo, don Héctor Herrera: Cheto, Sakuja, el Chino, el propio Cholo Bond, Petrona, Chela, la “Chichí” Ayora; todos habrán disfrutado divertidos la parodia de Melo, entre esencias de panuchos y horchata, y le daban las gracias por mantener vivo el buen teatro regional.

edgarrodriguezcime@yahoo.com.mx

colectivo cultural “Felipa Poot Tzuc”

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