Letras
Eliezer Trejo Cámara
Desprendiste con calma tus cendales
ante el mar que mirabas indecisa
y temblaron al soplo de la brisa
tus blancas opulencias virginales.
En tus labios fragantes y sensuales
floreció vagamente una sonrisa
al ofrecer con claridad sumisa
las glorias de tu cuerpo a los cristales…
El agua con sus ondas placenteras,
subiendo por tus mórbidas caderas,
ciñó tu talle grácil y albugíneo.
Y al tocar de tu seno los capullos,
se abrió sonora y alocadamente
en explosión de besos y de arrullos.
- de H., 14 de enero de 1914.
Génesis. Pauca, sed Bona. Mérida, año 1, núm. 3, 1 de febrero de 1914, p. 8.
[Compilación de José Juan Cervera Fernández]