Acuse de Recibo
ALFONSO HIRAM GARCÍA ACOSTA
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Hola Hiram y gracias al Diario del Sureste. Buenos días (o la etapa del día que corresponda). No había podido comunicarme debido a que la tecnología parece ensañarse conmigo pues ahora, a raíz de los chubascos que afectaron la ciudad, me quedé sin servicio de internet semana y media, durante la cual pude descubrir el grado de incomunicación (en ambos sentidos) que eso representaba, especialmente en estos días de semiseclusión generalizada. Fue un gusto haber leído “Federico García Lorca en Cuba” en el Diario del Sureste del que usted es colaborador, editorial que rememora a una de nuestras glorias del idioma español durante su estadía de tres meses en La Habana, hecho que yo ignoraba hasta este momento. La grafía del poema autógrafo en la foto frente al Faro del Castillo del Morro revela el carácter flotante y libre, aparentemente desestructurado y genial del poeta fuenterino. Todas las imágenes incluidas en el artículo revelan alegría e intenso disfrute de su estadía en la Isla caribeña. Emocionantes frases “la América de Dios, la América española” de su conferencia, me recordaron la Salutación del Optimista de su hermano americriollo Rubén Darío “Ínclitas razas ubérrimas, sangre de Hispania fecunda”, cantos hermanos a la esperanza siempre fallida de una América realmente libre, a imagen de la España Republicana que ya se gestaba entonces y que en su agonía final terminaría engullendo prematuramente a García Lorca entre otros muchos de sus hijos.
Excelente ensayo con acentuado sabor cubano. Siempre se encuentran agradables sorpresas en el Diario al que usted contribuye regularmente. Como siempre, deseándoles lo mejor a usted y los suyos, esperando siempre continúen contándose entre los indemnes de la época. Ave atque vale. Fernando J. Arjona Monforte.
El Centro Federico García Lorca de Granada acogió la primera exposición sobre la importancia del amor en la obra del poeta. La muestra contenía documentos de la Residencia de Estudiantes de Madrid, aunque parte del material era del propio consorcio o cedido por familiares del poeta.
Gracias por tus letras, Fernando. El musicólogo e investigador José Ruiz Elcoro y tú siempre me hacen escudriñar las entretelas literarias y, lógico, escribir sobre ellas. Hoy, en nuestro Diario del Sureste, podrás encontrar la segunda parte y conclusión de García Lorca en Cuba en 1930.
Atisbando, encontré a un García Lorca desconocido
Ya en 1934, animado por los ecos del éxito de sus obras que desde allí llegaban hasta España, Federico García Lorca decidió tomar un barco y viajar hasta Uruguay, en donde fue recibido con todo tipo de agasajos y honores. El poeta granadino descubrió entonces las dimensiones internacionales de su obra y la repercusión que tenían, tanto como él, al otro lado del Atlántico. Fue un viaje sobre el que se ha pasado de puntillas en las biografías de Lorca, pero que marcó profundamente al poeta. Ahora, dos investigadores uruguayos, Pablo Rocca y Eduardo Roland, han decidido seguir los pasos del granadino y publicar el libro “Federico García Lorca y Uruguay” (Pasajes, homenajes, polémicas) (editorial Alcalá), que revela algunos de los elementos más desconocidos de la estancia del poeta en ese país sudamericano. [Es posible que en ese país se edite mi libro “Diálogo entre Poetas” Alfonsina Storni e Hiram García; mi representante en ese país es Hugo Altez Alberti, compañero de teatro y tiene el poder para gestiones en el Centro Cultural “La Mancha” en Maldonado y en Punta del Este en Uruguay.]
García Lorca partió a Nueva York en 1929, con el deseo de olvidar a su último amor y el desencuentro con Dalí. No aprendió tanto inglés como esperaba, pero escribió uno de los poemarios más celebrados del siglo XX: “Poeta en Nueva York”. En sus próximos viajes por Latinoamérica, Lorca por fin pudo expresar su condición sexual sin temor a ser perseguido o marginado como en España. Una exposición de 2019 presentó el abrumador éxito de su teatro en Cuba o Argentina, a través de los recortes de periódico que el propio poeta se trajo a España, y una foto del Teatro Avenida lleno para ver “Bodas de Sangre”. Además aparece expuesta la carta de protesta a Lorca en Buenos Aires por la obra “Yerma”, también mal recibida en España por la moral más puritana, en la que se le reprocha el lenguaje a la hora de referirse al coito de Yerma con su marido.
Como veis, Fernando y amigos lectores, hay material para seguir escribiendo sobre Lorca.
Saludos.
Fuentes
https://www.granadahoy.com/ocio/Garcia-Lorcadesconocido_0_445455883.html
https://elcultural.com/regresar-al-amor-con-garcia-lorca
https://www.elespanol.com/cultura/historia/20161005/160734576_0.amp.html
