- Héctor Herrera Alvarez «Cholo»
- José Antonio Méndez
- La liga de la decencia
- Una familia de la nueva ola
- El Mar y la Montaña
- Dr. José Loyola Fernández
- Cuentecito de Color
- México y España
- Dr. Eduardo Urzaiz Rodríguez
- Revolución, Amanecer y Esperanza
- César Portillo de la Luz
- Sicilia
- La legión de salvadores
Parásitos en los perros
Un parásito es un ser que se asocia a otro, beneficiándose y perjudicándolo. Llamamos «huésped» al animal que alberga al parásito. Los parásitos producen daños al huésped que los alberga, y el grado de daño depende de muchos factores:
- El parásito – Hay algunos más dañinos que otros, por ejemplo los ancylostomas
- El número de parásitos – A mayor cantidad, mayor daño
- El estado general del perro fuera de la parasitosis – En perros débiles el efecto es más notorio que en perros fuertes
En general, pueden causar pérdida del apetito, vómito, diarrea, anemia, e incluso la muerte en perros de todos los tamaños y de todas las edades, si no son desparasitados.
Su perro tiene un estrecho contacto con usted. Sin embargo, es difícil protegerlo de parásitos gastrointestinales por lo que a veces se enferma. Si usted no ha desparasitado a su perro en los últimos 3 meses, es exactamente lo que podría estar pasando.
Los parásitos son muy contagiosos y, una vez que su perro los contrae, su salud se verá seriamente afectada. Los signos pueden ser muy sutiles y difíciles de identificar, sobre todo en perros de edad avanzada, pero en cachorros y adultos jóvenes los signos son más severos. En la mayoría de los casos, su perro puede tener pérdida del apetito, resultando en una rápida pérdida de peso, incluso con vómito. También puede presentar diarrea, anemia y, si no se actúa, incluso puede morir.
El control de los parásitos intestinales de nuestros perros es muy importante, sobre todo en los cachorros. Los parásitos intestinales (llamados también parásitos internos) son muy frecuentes en el perro. Su importancia no sólo radica en los problemas que pueda producir a los perros, sino que muchos de ellos son transmisibles a las personas.
Los parásitos más comunes que encontramos en el perro son:
- Coccidios – Son unicelulares, por lo tanto, solo visibles al microscopio. La parasitosis por coccidios puede alcanzar extrema gravedad, al punto de matar al animal, lo que se produce más frecuentemente en cachorros. Hay pérdida de peso, de apetito y diarrea con mucus y estrías de sangre, hay anemia. La diarrea es intermitente. Para combatir la coccidiosis es necesario que los cachorros estén en lugar seco. Cuando la diarrea es muy intensa es conveniente dar un antidiarreico e hidratar antes de hacer el tratamiento.
- Tenias – El perro puede albergar varios tipos de tenias, pero en las ciudades se trata casi siempre de Diphylidium caninum, cuya forma adulta puede llegar a medir 15 a 70 cm. Está compuesta por segmentos o proglótides; ya maduras, se desprenden y pueden verse alrededor del ano, y hasta en los muslos y en el lomo. Son gusanitos chatos de 0,5 a 1 cm de largo, parecidos a un granito de arroz que se mueve enérgicamente. Son de color blanco o rosa muy pálido, y se suelen observar también en la materia fecal. Estas proglótides contienen los huevos de la tenia y, cuando ya maduros, se desprenden, se mueren y deshacen, dejando libres a los huevos. La pulga, en un momento de su evolución, se alimenta de la materia fecal del perro, comiéndose los huevos de la tenia. Más tarde, la pulga sube al perro y lo pica. Éste, al rascarse, se come la pulga que ya desarrolló un quiste que contiene larvas de tenia. Así se desarrollan larvas adultas en el intestino del perro. De esto se deduce que mientras el perro tenga pulgas no podrá desprenderse de sus tenias; por lo tanto, hay que encarar dos acciones: a) combatir las pulgas y, b) dar un tenicida. Los síntomas de la teniasis varían según el estado general del perro. Puede haber materia fecal blanda, trastornos del apetito, que en general está aumentando, y picazón en el ano, causada por la presencia de proglótides. También pueden producirse ataques de tipo epileptiforme y es común el encarpamiento de la región lumbar, producido por la irritación del intestino. El pronóstico es en general favorable.
- Ascaridiasis – Los áscaris son parásitos redondos que miden entre 5 y 15 cm de largo, muy semejantes a fideos. Son las típicas “lombrices» que despiden los cachorros al ser desparasitados. Cumplen un ciclo dentro del perro que es importante conocer para comprender algunos síntomas y el plan de desparasitación. El perro come el huevo del parásito y en su intestino se libera la larva. La larva atraviesa la pared intestinal y llega al hígado, produciendo daño hepático. Luego va al pulmón, donde produce síntomas respiratorios. El perro tose, y las larvas son tragadas y llegan al intestino, donde se desarrolla el parásito adulto. En el perro adulto es muy difícil encontrar parásitos adultos en el intestino; sin embargo, hay larvas que viven enquistadas en diversas partes del cuerpo y, cuando la perra se preña, pasan a través de la placenta a los cachorros que ya nacen parasitados. Los síntomas son los siguientes: a) Generales: disminución del crecimiento, pérdida de peso, abatimiento, pelo muy seco, mucosas pálidas, cansancio. b) Digestivos: vómitos, a veces con parásitos, diarrea pastosa, dolor abdominal, cólicos e hinchazón del abdomen (el perrito está panzón). c) Nerviosos: ataques epileptiformes, parálisis del tren posterior, nerviosismo, picazón. d) Piel: alergias y picazón. e) Pulmonares: tos, catarro y, a veces, neumonía que puede cursar con fiebre y falta de apetito
- Ancylostomiasis – Es el más dañino de todos los parásitos del perro. El parásito es pequeño, de alrededor de 1 cm de largo y finito, como un hilo de coser, a pesar de lo cual es muy dañino. Se adhiere al intestino y se alimenta de sangre, chupando cada ancylostoma 1 cm3 de sangre por día. Si a esto agregamos que el parásito cambia de lugar con frecuencia y deja en el sitio en que estaba adherido una herida que sangra durante mucho tiempo, nos damos cuenta que la pérdida de sangre es muy importante. La gravedad de los síntomas depende de la cantidad de parásitos presentes. El animal está flaco, anémico, la piel está seca, pueden aparecer edemas (hinchazón) en las patas y en la parte baja del pecho y el abdomen. Hay diarreas con estrías de sangre, dolor abdominal y puede haber ataques epileptiformes. En parasitosis intensa el animal muere.
- Trichuris – Es un parásito de 3 a 4 cm de largo en forma de látigo, con un extremo grueso y otro como un hilo. Hay diarrea sanguinolenta, flacura, pelo seco y colorado y puede haber encarpamiento lumbar.
- Giardiasis – Esta parasitosis está producida por otro parásito unicelular que habita en el intestino. Es difícil su diagnóstico, ya que la forma activa es móvil y se destruye fácilmente. Al recoger materia fecal fresca y ponerla en formol, las giardias se destruyen y no se ven en los análisis. Para detectarlas, hay que mirar la materia fecal fresca recién emitida (se observa el parásito vivo), o dejar la materia fecal en la heladera 12 hs sin formol, para permitir que se formen quistes, y después agregarle formol. Los perros muestran diarrea clara con mucus, sangre, defecaciones frecuentes y, en general, falta de apetito. Es típico encontrar perros que comen poco y solamente algunos días. También existe contaminación ambiental difícil de combatir.
¿Cómo se infecta mi cachorro?
Tu cachorro se infecta de varias maneras: bien puede darse por contaminación cruzada, esto es, que ingiera huevecillos del parásito que son eliminados en las heces de otros perros que estén parasitados. Ahora bien, te preguntarás cómo los ingiere. La respuesta es muy fácil: cada vez que huele las heces fecales de otro perro, o come pasto en algún jardín, éstos pueden estar contaminados, y de esa forma contaminarse él también. Otra manera de infectarse con el parásito (toxocara canis) es por vía transplacentaria, es decir, que la hembra gestante que no es desparasitada antes de la monta, durante la gestación puede tener en sus masas musculares larvas del parásito en estado somático. Éstas, cuando tu perrita está gestante, detectan la progesterona (hormona que mantiene la gestación) y salen de ese enquistamiento, comienzan a migrar, y a través de la placenta llegan a los productos (cachorros) y comienzan a parasitarios. De tal forma que, al nacer los cachorros, ya están parasitados y son los más sensibles a la infestación, causándoles incluso la muerte, si no son atendidos rápida y adecuadamente.
Cierto tipo de parásitos que afectan a su perro pueden además tener efectos en el ser humano, aunque esto es relativamente raro. La infección ocurre simplemente al ingerir accidentalmente los huevos o las larvas, y por supuesto esto es muy común especialmente cuando los niños juegan con los cachorros, o cuando hay un contacto muy estrecho. Las tenias afectan seriamente al ser humano.
Hay que acudir al Veterinario cada 3 o 6 meses para desparasitarlos, nunca auto medicarlos, además de RECOGER SUS HECES, para así evitar fecalismo al aire libre.
Por su salud y por la tuya, sé un DUEÑO RESPONSABLE.
Dra. Carmen Báez
Presidenta de El Muro Mérida A.C.
0 comments