“FACTOR DE DESARROLLO” Y MEJORAMIENTO EN LA ESTRUCTURA SOCIAL
Jorge Frías Castillo
FEBRERO, 2020 – Los medios de comunicación, lo mismo que el desarrollo del transporte y la estructura básica de conectividad en la vida moderna, son sin duda uno de los elementos tecnológicos que han dado a la humanidad un gran brinco, y con géneros de gran estratigrafía social, los sistemas y métodos, este conjunto de medios, instrumentos y recursos han permitido a las masas transmitir ideas, así como transportarse y codificar bienestar con actitudes e imágenes, generando palabras, escritos, emitiendo avances cotidianos a los nuevos descubrimientos geográficos, tecnológicos, intelectuales con las revoluciones importantes en los últimos 150 años.
Nosotros, como civilización, tenemos una conciencia del pasado. Las sociedades no existieran si no hubiesen sido capaces de transmitir sus pensamientos con ideas a través del tiempo y el espacio, con sonidos, pinturas, escritos, caminos, señales de fuego, metales, enseñanzas filosóficas, hasta llegar hoy en día a los aviones, satélites, cohetes y alunizar.
El patrimonio espiritual que todo esto ha arrojado conserva los diferentes sistemas y métodos de comunicación en un proceso paulatino, ininterrumpido.
La pictografía, siendo la forma más antigua de escritura, consiste en dibujar una figura esquemática de las cosas y los actos, formando narraciones cronológicas y leyendas transmisibles a las generaciones futuras.
Los instrumentos de percusión utilizados por los primeros grupos étnicos que se comunicaron a distancia y con sonido, la prensa rotativa –valioso auxiliar en el periodismo y en la transculturización moderna–, nacida de la impresión con tipos atribuida al alemán Juan Gutenberg, vino a multiplicar el mensaje cultural de nuestra civilización. Surgieron revistas ilustradas, un sinnúmero de libros en donde el conocimiento fue esparcido como vehículo de ideas, se agitaron las condiciones a intelectuales, y las sociedades aplicaron modernas ideologías que cambiarían el mundo pos venidero.
Cuando el francés Claudio Chappe inventó el telégrafo óptico, instrumento formado por dos brazos móviles, se pudieron enviar mensajes por medio de señales, transmitiendo noticias a gran distancia. No se olvida que las revoluciones tecnológicas del siglo XX, con la electricidad que ha logrado ser la fuente para activar múltiples medios en la vida actual, se aplicaron a las comunicaciones, maquinaria industria naval, automotriz, aérea, equipos de telecomunicación como, en 1835, el telégrafo inventado por el inglés Weatstone y el norteamericano Morse.
La historia de las comunicaciones humanas las podemos resumir mencionando algunas fechas de importancia que marcan el comienzo de nuevas etapas hacia lo que vivimos hoy y lo que el futuro empieza a labrar a un universo sin fin en la gama de los avances de comunicación.
En 1600 A.C., los fenicios y otros pueblos semitas desarrollan el alfabeto; en el 800 A.C., en Asiria de Nínive, las bibliotecas guardan en cilindros de arcilla documentos cuneiformes de pobladores de Mesopotamia; en el 400 A.C. los hindúes inventan la numeración, aunque se cree los mayas ya empiezan con elementos de clasificación en esas fechas.
En el 63 A.C., el romano Marco Tulló crea el primer sistema de taquigrafía; en 1454, en la ciudad alemana de Maguncia, aparece la primera Biblia impresa por tipos móviles por Juan Gutenberg; en 1600, en ciudades alemanas surgen primeras hojas de noticias; en 1792, el telégrafo óptico de Chappe; en 1796, en Múnich aparece el sistema de litografía; en 1799, el investigador Boussard, en Egipto, en una expedición napoleónica, descubre la piedra Roseta, clave que revela los secretos de idiomas antiguos; en 1829, Braille, en París, desarrolla el sistema alfabeto para ciegos; en 1839, Luis Daguerre perfecciona el primer aparato de fotografía; en 1895, Guillermo Marconi fabrica un aparato sin ayuda de alambres e inicia la radiotelefonía; en 1907, la válvula de radio de Lee de Forest; en 1920, las primeras transmisiones públicas en los Estados Unidos; en 1925 comienza a difundirse el teletipo máquina que permite enviar noticias telegráficas; en 1936, las primeras transmisiones públicas de televisión en Londres y Nueva York, y es ahí donde, al borde de la Segunda Guerra Mundial, se desencadena la ciencia tecnológica, avanzada armamentista y aérea.
Estas fechas solo marcan el nacimiento de algunos métodos principales en el mundo de la comunicación que el hombre ha desenvuelto vertiginosamente hasta el día de hoy. El desarrollo de las comunicaciones ha hecho posible que un acontecimiento pueda ser conocido por un público muy alejado del lugar; la radio, la televisión, el desarrollo satelital, y ahora los grandes y perfeccionados telescopios con sistemas laser para ver más allá del cosmos. Lo mismo sucede con el mundo submarino, que cada día es más explorado hasta sus rincones más misteriosos con descubrimientos de nuevas especies marinas y sistemas en las profundidades jamás vistos y que, gracias a la tecnología subacuática, nos llega hasta la comodidad de nuestros hogares arriesgadas inmersiones.
Conociendo un poco de esta historia humana resumimos su importancia económica y cultural, ampliando nuevos horizontes en el mundo entero y el futuro en un segundo.