Entrevista: MAESTRA EFFY LUZ VÁZQUEZ LÓPEZ – VOCACIÓN Y CAPACIDAD EDUCATIVA

Con el mismo pensamiento noble, con la energía que siempre le hemos reconocido, y en búsqueda de esa capacidad de trabajo que contagia, hemos acudido a la Casa de la Historia de la Educación en Yucatán para reencontrarnos con una mujer ejemplar, poseedora de un espíritu cultural enorme – del que hemos dado testimonio a través de varias décadas bien en “Diario del Sureste”, como en la música, el canto, las actividades culturales–, y una continua presencia en el contexto formativo de niños, jóvenes y adultos mayores.

Persona sencilla, estamos ciertos que lleva en la sangre la herencia positiva de sus padres, Don Aristeo Vázquez Delgado y Doña Julia López Montalvo, ambos maestros de prosapia y trascendente presencia en Yucatán.

Estamos ante una personalidad que impacta y convence con sus conocimientos y experiencias.

Está ante nosotros una maestra distinguida, con ideas claras y certeras acerca del enorme trabajo que competen al maestro y al sistema educativo para mantener y elevar en los escolares yucatecos los niveles de calidad, conocimientos, capacidad de razonamiento y sensibilidad social, que son esenciales para que en el mañana cercano sean hombres y mujeres de provecho, capaces de impulsar y hacer más firme la convivencia.

Para esos niños y jóvenes debe considerarse una educación excelente.

Le preguntamos:

¿Cómo debe ser la educación en estos tiempos?

Mi opinión es que debe ser una educación integral. En cuanto a esto, considero que deben ser utilizados los métodos adecuados para inculcar conocimientos, pero también debe impulsarse el enaltecimiento de valores, la educación artística, porque el alumno debe mantener contacto tanto con sus valores familiares como culturales, no porque vaya a ser poeta, músico o escritor, sino porque deben considerarse estos aspectos como base de su desempeño futuro.

¿Cómo han motivado o activado programas de este tipo en las escuelas?

El maestro o la maestra deben usar la metodología para sembrar el conocimiento pero, al usar también como elemento el teatro escolar, deben hacer partícipes a sus alumnos de situaciones diversas que se exponen en escenarios, y dejar mensajes tanto a ellos como a sus padres, a la comunidad, con las actuaciones del alumno y lo que aprenden de ellas.

Los programas de lectura también ayudan, porque al leer se asimilan conocimientos, situaciones, experiencias de ahora y siempre. Los homenajes cívicos son relevantes así mismo, porque influyen anímicamente en los educados. Los padres entregan a sus hijos a los maestros para que los formen y hagan mejores. Eso entraña que también se enseñen el orden y el respeto, el cuidado de instalaciones, el abandono de costumbres lesivas y el rechazo a los vicios.

¿Así ha sido siempre la educación en Yucatán?

Hemos tenido grandes pedagogos, maestros extraordinarios, formadores con gran personalidad e impacto social. Y no me refiero al hoy, sino que la tradición en nuestro Estado es antigua y de muchos años. Hemos tenido maestros ejemplares, ideólogos, grandes figuras que han dejado huella en cuanto a la educación. De ellos hemos aprendido. Sus experiencias han sido esenciales para nosotros.

¿Esa es la razón de existir de la Casa de la Historia de la Educación en Yucatán?

Desde luego. Este es un espacio abierto para conferencias, foros, coloquios, actividades académicas y/o culturales, presentaciones de libros y demás. En la calle 60 con 45 y 47, frente al parque de Santa Ana, se cuenta también con la Biblioteca del Maestro y ahí se conservan, protegen y resguardan libros, documentos de diversas épocas, fotografías y objetos relacionados con escuelas de todos los niveles educativos del Estado. Ambos espacios los consideramos esenciales y agradecemos las facilidades que nos han sido dadas para su operación.

¿Alguna otra actividad complementaria de estas dos dependencias?

El patrimonio educativo es una cosa muy valiosa. Así lo entendemos. Por ello, estamos convencidas como maestras de que los mensajes del pasado, la evolución, las tesis, los trabajos y su efectividad, deben ser perdurables.

Se cuenta con un periódico mensual, “El mensajero escolar”, que vincula histórica e informativamente a la comunidad educativa y a la sociedad. También realizamos la edición de libros, que son el medio que aporta elementos de apoyo para la tarea escolar que desarrollamos. Ya se cuenta con varios títulos que brindan materiales útiles y de consulta a los maestros.

¿Algún mensaje final?

Creo sinceramente que la educación fortalece la fe en nosotros mismos, nos supera como personas y como sociedad. Es un instrumento poderoso para la evolución social, la paz, el progreso compartido. Todos ansiamos un mejor Yucatán, y un camino para lograrlo es a través de la superación personal, por medio de nuestro sistema educativo. Convivir en una sociedad donde todos nos hermanemos es un propósito educativo, pero también una meta a lograr con la participación de todos.

La maestra Effy es un ejemplo de perseverancia en los ideales paternos y fe en la capacidad colectiva para el logro de vivir, por medio de la educación, en las condiciones de justicia y bienestar que merecemos.

C.P. Luis Alvarado Alonzo

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