Un Ángel Caído

By on junio 22, 2017

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Un Ángel Caído

Hay bandas que parecen destinadas al fracaso, pese a contar con elementos suficientes para dejar huella. Angel es uno de esos casos.

Conocí a Angel a inicios de la década de los ochentas gracias a la generosidad de mi entrañable amigo Javier Álvarez, quien me dio prestado el álbum doble en vivo Live Without a Net, el cual me pareció muy bueno, pese a no conocer las canciones ni a ninguno de sus integrantes. Decidí darme a la tarea de conseguir sus discos de estudio, cosa nada fácil porque no llegaban a México y la única vía para ello era encargarlos importados.

Conforme me fui adentrando en los detalles de su trayectoria, me di cuenta de que era un proyecto que merecía mejor suerte: tenían muy buenas canciones, una presencia escénica llamativa – ya que todos vestían de blanco–, con escenarios temáticos, efectos, luces, y todos los clichés que las bandas de rock duro incluían en sus conciertos. Eran admirados por una buena legión de fans, la mayoría mujeres hermosas, firmaron con una compañía importante, fueron apadrinados por el grupo Kiss… ¿Entonces qué diablos pasó? ¿Por qué mordieron el polvo cuando mejor parecía ir las cosas? Todo eso les contaré a continuación.

La historia de Angel, esta banda norteamericana de glam rock, inició en Washington, D.C., a mediados de los setentas, después que el guitarrista Punky Meadows (ex The Intruders y The Cherry People) uniera fuerzas con el bajista Mickie Jones para formar Daddy Warbux, grupo que luego cambió su nombre a BUX, con quienes grabaron en 1973 el álbum We Came to Play, aunque la compañía Capitol se negó a lanzarlo.

Tras esto, Punky y Mickie conocieron al tecladista Gregg Giuffria, al baterista Barry Brandt y al cantante Frank Dimino, decidiendo dar vida a un nuevo proyecto al que bautizaron como Angel, en honor al tema de Jimi Hendrix, de quien Meadows era un fanático.

Durante una de sus primeras actuaciones en un club de Seattle, fueron detectados por Gene Simmons, el famoso bajista de Kiss, que con su gran olfato los apoyó para que fueran firmados por Casablanca Records, aunque con la condición de que en escena vistieran completamente de blanco, para ser la contraparte perfecta de Kiss, donde predominaba el negro. Angel era el cielo y Kiss…. ¿el infierno?

Su primer álbum, titulado Angel, fue grabado en los Wally Heider Studios, de Hollywood, California, y fue lanzado el 27 de octubre de 1975. Tuvo en Tower su tema más efectivo, ya que fue utilizado ampliamente a finales de los 70s y principios de 1980 por varias estaciones de radio de rock. El disco deja claras sus primeras raíces progresistas, fusionadas con un rock más duro, con guitarras fuertes, voces altísimas y melodías pegadizas. Destacan también Long Time y Rock and Rollers, así como la mini suite conformada con las tres canciones finales: Sunday Morning, On & On y Angel.

Los conciertos de Angel iniciaban con una voz en off que narraba la historia de inmortalidad celestial de sus integrantes, para dar paso a todo tipo de efectos.

Los conciertos de Angel iniciaban con una voz en off que narraba la historia de inmortalidad celestial de sus integrantes, para dar paso a todo tipo de efectos.

Su primera gira por los Estados Unidos contó con buena respuesta, incluyendo algunos shows con boletaje total vendido. Sin embargo, el disco no alcanzó los pronósticos optimistas que tanto el grupo como la casa grabadora esperaban.

Helluva Band se lanzó en 1976 y en esta ocasión fue notable una evolución en las ideas, pues contó con más canciones pegadoras, como la inicial Feelin’ Right donde Punky Meadows alterna sus solos de guitarra con los de teclado a cargo de Gregg Giufria, la suite The Fortune de casi 9 minutos de duración, la pegajosa Anyway you Want It, Mirrors (la más pesada, sin llegar a ser heavy), Pressure Point, muy al estilo del grupo Rainbow, y Chicken Soup, cotorra y prendida. El disco contó con mejores ventas que el del debut y la correspondiente gira también pareció arrojar mejores resultados en asistencia, por lo que incluso la compañía Capitol, que había enlatado el álbum We Came to Play de BUX en 1973 (el ex grupo de Punky Meadows y Mickie Jones), decidió lanzarlo para aprovechar aquel momento de ‘fama’ de Angel.

En 1977 lanzaron su tercer álbum de estudio: On Earth as It Is in Heaven que de nuevo reflejó mejorías palpables con una mejor colección de temas como la inicial Can You Feel It con un solo de guitarra realmente pegador, She’s a Mover donde la voz de Frank DiMino luce sumamente clara, Big Boy (Let´s Do It Again) es un medio tiempo muy remarcado, la cachonda Telephone Exchange, la efectiva White Lightning compuesta por Punky y R. Morman, y On The Rocks, festiva y ponchadora. Los temas restantes no es que desmerezcan, pero son quizá un poco más pretenciosos; por ejemplo, en You’ re Not Fooling me y That Magic Touch es notable la influencia coral del grupo Queen.

Con su cuarto álbum de estudio, White Hot, la banda contó con un nuevo bajista tras el retiro de Mickie Jones, quien fue reemplazado por Felix Robinson. Con este disco lograron su único hit con el tema Ain’t Gonna Eat Out My Heart Anymore, que alcanzó el puesto número 44 en la lista de Billboard en 1978, donde se mantuvo por solo ocho semanas. Aparte, destacan otras buenas rolas como Over And Over’que se volvería obligada en sus conciertos, Hold Me, Squeeze Me la cual se te pegaba apenas en la primera escucha, y Got Love if You Want It, de los más duros de la colección. Mención aparte merece Do Not Leave Me Lonely, originalmente grabada por los Young Rascals en 1965 como su single de debut, aunque nunca fue un gran éxito con esa banda, ni con Angel pues su versión, aunque efectiva, una vez más, se negó a subir las listas.

Vale la pena hacer un paréntesis en relación a White Hot, para mí el último gran disco de Angel, que sin duda merecía mejor suerte: le tocó salir en una época en la que las cosas estaban cambiando en la escena musical con la llegada de la New Wave, que estaba forzando a las bandas a recortar los tradicionales espectáculos llenos de bombas, humo y efectos.

Pese a esto, todavía alcanzaron a realizar una gira por Japón, donde fueron recibidos como auténticos héroes, siendo el único país donde puede afirmarse que triunfaron en toda la extensión de la palabra.

La discografía de la banda constó de cinco álbumes, de los cuales los cuatro primeros eran realmente buenos.

La discografía de la banda constó de cinco álbumes, de los cuales los cuatro primeros eran realmente buenos.

Sinful, de 1979, originalmente se titularía Bad Publicity, y quizá hubiera sido más adecuado, dado el cambio de giro que la banda impuso a su música en un afán de conseguir mayor penetración en las listas, cosa que no lograron: su sonido perdió fuerza y se convirtió en un rock pop que no convenció a sus fanas más acérrimos. El bajista Felix Robinson grabó el material de este disco, pero no permaneció mucho tiempo más.

En 1980 lanzaron Live Without a Net, su primer álbum en vivo, con grandes expectativas ya que consideraban que los impulsaría definitivamente al estrellato, tal como ocurrió con el grupo Kiss y su disco Alive, pero ocurrió todo lo contrario: no alcanzó la repercusión que esperaban y, ante el desánimo general, la banda decidió terminar su historia en 1981.

Hubo algún intento de reunificación en 1999 con el álbum In the Beginning, pero ya solamente con Frank Dimino como miembro original, pero todo fue inútil: la magia se había ido y el Ángel inició su dramático e imparable descenso.

RICARDO PAT

riczeppelin@gmail.com

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