La Depresión Postparto – Tristeza que genera culpa

By on octubre 12, 2017

La Depresión Postparto – Tristeza que genera culpa 

«Antes de concebirte ya te quería. Antes de que nacieras ya te amaba. Antes de que tuvieras una hora de nacido ya moría por ti. Este es el milagro del amor de madre.»

Maureen Hawkins

El nacimiento de un niño debe ser un acontecimiento de regocijo para los nuevos padres y para la familia en general, pero también acarrea un padecimiento bastante común en las madres: la Depresión Postparto.

El nacimiento de un niño debe ser un acontecimiento de regocijo para los nuevos padres y para la familia en general, pero también acarrea un padecimiento bastante común en las madres: la Depresión Postparto.

El nacimiento de un pequeño es generalmente un motivo de alegría para toda la familia, la llegada de un nuevo miembro a ella causa expectativa, y un bebé por si mismo nos inspira ternura y tranquilidad. Ante tanta dicha no se contempla que pudiera ocurrir uno de los padecimientos más comunes en las mamás, la Depresión Postparto.

La Depresión Posparto es la aparición de una depresión en la madre tras el nacimiento de su hijo; en ocasiones puede ser resultado de complicaciones en el parto, enfermedades en el bebé o un embarazo no deseado, pero también puede aparecer sin motivo aparente.

Cuando la aparición de este malestar no tiene una explicación, la mujer generalmente desarrolla un sentimiento de culpa, sintiéndose una “mala madre”, pues no reacciona como lo que se esperaría ante la llegada de un hijo. Esto también puede ser mal visto por su familia y conocidos, además que culturalmente en nuestro país el papel de la madre es severamente juzgado.

Hay que comprender que estas mujeres están experimentando una de las complicaciones más frecuentes al dar a luz, ya que una de cada diez mujeres sufre de la Depresión Postparto.

Una de cada diez mujeres que dan a luz sufre Depresión Postparto; esta condición puede presentarse poco después del alumbramiento, o incluso un año más tarde.

Una de cada diez mujeres que dan a luz sufre Depresión Postparto; esta condición puede presentarse poco después del alumbramiento, o incluso un año más tarde.

Un trastorno que todavía sufren en silencio un gran número de mujeres

Esta depresión se puede presentar poco después del parto, o hasta un año más tarde. La mayor parte del tiempo ocurre dentro de los primeros tres meses después del parto.

Los cambios en los niveles hormonales durante y después del embarazo pueden afectar el estado de ánimo de una mujer, agregando cambios normales, pero que son significativos para las mamás como tener menos tiempo para sí misma, la falta de sueño, cambios en el cuerpo, afectaciones en el trabajo y los amigos, así como la constante preocupación de su capacidad para ser madre.

El papel de la pareja y la familia es fundamental, ya que deben brindar apoyo y protección a la nueva mamá que está experimentando algo que jamás había sentido y necesita de su compresión y ayuda.

Los sentimientos de ansiedad, irritación, tristeza con llanto e inquietud son comunes en las dos primeras semanas después del embarazo. Estos sentimientos a menudo se denominan «Depresión puerperal». Casi siempre desaparecen pronto, sin necesidad de tratamiento.

Sentimientos como la tristeza, irritabilidad o ansiedad son comunes durante las dos primeras semanas después del parto, y deberían desaparecer sin necesidad de tratamiento; en caso de permanecer, se debe buscar ayuda profesional.

Sentimientos como la tristeza, irritabilidad o ansiedad son comunes durante las dos primeras semanas después del parto, y deberían desaparecer sin necesidad de tratamiento; en caso de permanecer, se debe buscar ayuda profesional.

Entre los síntomas de una depresión posparto se encuentran:

  • Agitación e irritabilidad
  • Cambios en el apetito
  • Sentimiento de inutilidad o culpa
  • Sentirse retraída o desconectada
  • Falta de placer o interés en todas o en la mayoría de las actividades
  • Pérdida de la concentración
  • Pérdida de energía
  • Problemas para realizar las tareas en el hogar o el trabajo
  • Ansiedad considerable (preocuparse intensamente por el bebé o tener poco interés en él)
  • Pensamientos de muerte o suicidio
  • Alucinaciones
  • Dificultad para dormir

Otros síntomas que se presentan y generan bastante nerviosismo son la sensación de incapacidad de cuidarse a sí misma o al bebé, o incluso temor de estar sola con el bebé por miedo a hacerle daño; éste último llena de terror a la madre. Aunque en la mayoría de los casos estas ideas agresivas no se llevan a cabo, es importante no tener miedo de buscar ayuda inmediatamente si te sientes abrumada y con temor de que puedas hacerle daño al bebé

El acompañamiento de la pareja, y de la familia en general, es de suma importancia ya que la nueva mamá está experimentando cambios hormonales que se reflejan en su estado de ánimo.

El acompañamiento de la pareja, y de la familia en general, es de suma importancia ya que la nueva mamá está experimentando cambios hormonales que se reflejan en su estado de ánimo.

Es importante estar alerta de estos síntomas pues una Depresión Postparto sin tratamiento puede durar meses o años, mientras que si se recibe ayuda psicológica y médica tiene un buen pronóstico de recuperación.

Los medicamentos antidepresivos actúan sobre las sustancias químicas del cerebro que intervienen en la regulación del estado de ánimo. Muchos antidepresivos demoran unas semanas en ser más eficaces. Aunque estos medicamentos generalmente se consideran seguros para usar durante el amamantamiento, la mujer debería consultar con su proveedor de atención médica acerca de los riesgos y los beneficios que estos medicamentos implican, tanto para sí misma como para su bebé. Estos métodos de tratamiento se pueden usar solos o en combinación.

Si eres mamá primeriza, no dudes en hablar acerca de tus sentimientos y estar pendiente de cualquier síntoma, pedir ayuda con tu bebé y el cuidado de tu hogar. No busques ser un modelo de perfección; es normal que te lleve tiempo adaptarte a este nuevo estilo de vida. Procura que durante este lapso no haya cambios importantes como un nuevo trabajo o un cambio de residencia. Hazte un tiempo para salir, visitar a los amigos o pasar tiempo a solas con tu pareja.

Ser madre es difícil. No sientas culpa por no ser perfecta. Relájate y verás que todo se resuelve. Una buena madre se equivoca y lo vuelve a intentar.

Recuerda que no hay madres perfectas, así que no dudes en pedir ayuda si sientes que algo no va bien, sobre todo si eres mamá primeriza.

Recuerda que no hay madres perfectas, así que no dudes en pedir ayuda si sientes que algo no va bien; sobre todo si eres mamá primeriza.

Facebook: Psicóloga Jimena Baez

Psicología Clínica /Arteterapia

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.